Afterlife regresó a la CDMX con su gran producción y visuales
Apostándole a un nuevo venue con su socio Ocesa
Un año después regresó una de las mejores fiestas del mundo, Afterlife llegó al Autódromo Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México con lo que prometía ser una gran noche y donde se presentaron mas de 60 mil asistentes.
El ya conocido sello de Matteo Milleri a.k.a Anyma y Carmine ‘MRAK’ Conte en los más recientes años se ha caracterizado por sus visuales que te llevan a una experiencie inmersiva junto con su Melodic Techno y acompañados de gran talento.
La noche empezaba algo agitada gracias al clima tan cambiante de nuestra ciudad y en el que alrededor de las 5:30 de la tarde se desató una tormenta por lo que el evento fue detenido por unos momentos y que lamentablemente ocasionó que 8Kays no se pudiera presentar.
Pasado esto, la fiesta reinició con un buen set de Massano seguido por el B2B del australiano Cassian con el alemán Kevin de Vries, de lo mejor de la noche. Posteriormente llegaron los jefes del sello iniciando con MRAK y su show ‘We Don’t Follow’, seguido del más esperado de la noche Anyma con su ‘Genesys 2.0’, el cual fue un poco decepcionante de ambos, ya que sentimos que el set no nos hizo sentir lo que esperábamos teniendo algunos errores con las transiciones en sus tracks y la vibe en general.
Finalmente vino el cierre con Tale of Us y, aunque su set no duró el tiempo que esperábamos, fue muy bueno y juntos rescataron llevándose el show y la noche, como están acostumbrados.
No obstante y fuera del espectáculo musical y visual, pudimos ver una gran desorganización y falta de logística en el área de recargas para la pulsera cashless y, sobre todo, con las bebidas donde te podías tardar hasta una hora esperando por un trago o por una simple botella de agua.
Lo que ya no es sorpresa pero no deja de sorprendernos son los precios que manejan, $220 una cerveza doble se nos hace un poco exagerado al igual que mas de cien pesos por una botella de agua (faltaron centros de hidratación ya que solo vimos uno por el stand de merch) o un refresco, además de que su vaso de Afterlife de la peor calidad, parecía que se te iba a romper en cualquier momento. Son situaciones que se pueden mejorar para eventos posteriores.
Esperamos pronto el regreso del dúo con su sello pero ojalá que se pueda conseguir un venue donde la fiesta garantice pueda continuar hasta el amanecer como nos tienen acostumbrados Tale of Us.